Los hermanos Emilio y Félix Pío Hernández comienzan su andadura como empresa en 1978 en La Matanza de Acentejo, en un terreno heredado de su padre, el cual desmontan y construyen el primer salón. Hoy día parte de esta ferretería.

La Empresa la forman los dos hermanos, aportando en su momento a la sociedad los camiones que poseían, ya que ellos provienen del gremio del transporte. La constitución por aquella época sería la de Cdad. De Bienes, para más tarde y con varios años de andadura, cambiar a su denominación actual.
A base de muchas horas de trabajo, ventas a pequeños clientes y financiación bancaria, compran los primeros camiones de transporte de mercancia ligera, y de esta forma atender la demanda en la difícil orografía del lugar. Con la continua expansión de la zona, y para poder atender a todo tipo de clientes como empresa constructoras y pequeños autónomos incrementan también sus medios, comprando una pala y una carretilla elevadora.

El personal con el que cuenta esta empresa en sus comienzos son sus dos socios, que a medida que trascurre el tiempo y aumentan sus ventas, se ven en la necesidad de contratar personal, aumentando paulatinamente a lo largo de estos treinta años a un total de 15 personas distribuidas en personal de Administración, dependientes, mozos de almacén, chofer, mecánico y personal de limpieza.
En el año 85 compran el primer equipo informático, un servidor y 2 puestos, uno para administración y otro para ventas.
Hoy en día se dispone de un servidor y 12 puestos independientes trabajando en red.
El material con el que cuenta la empresa para desempeñar su trabajo diario es de 5 camiones de diferentes tamaños, 2 cabezas tractoras, 2 bañeras o cunas, 2 planchas 1 pala y 2 carretillas elevadoras. Integrados en esta flota se cuenta con 2 gruas (una con alcance para 25m y otra de 14m)

Las instalaciones desde aquel primer salón en 1978 con 300 m2 distribuidos como almacén y atención al público se ha convertido en la actualidad en un hiper de ferretería de 800m2, 315m2 de almacén y 3755m2 de zona de carga, talleres y almacenamiento de materiales de construcción.
La intención aún en los tiempos que corren, es de no decaer y seguir creciendo procurando mantener esta empresa familiar por la cual tanto se ha trabajado.